Tradicionalmente, la fabricación de instrumentos ha requerido de materias primas de muy alto valor. Esto se debe a que un grupo muy limitado de recursos naturales son los idóneos para generar los sonidos perfectos de los múltiples instrumentos. Por ejemplo, para los pianos se suelen utilizar las maderas del abedul, del arce, de la caoba, del roble, del ébano y de distintas especies de abeto. Considerando, además, el uso del marfil para las teclas en los pianos más costosos.
Para la producción de guitarras también se realiza un gasto elevado. Algunas de las maderas utilizadas son: la encina, el tejo, el cerezo, el castaño, el cedro, el pino, el nogal, el sauce, el ébano, el roble, etc. Asimismo, se trabaja con el oro, el acero, el níquel, entre otros.
Sin embargo, cabe la pregunta: ¿Es posible crear instrumentos clásicos con proyectos sostenibles? Reuniendo criterios de ecologismo, practicidad y ahorro dinerario, se puede afirmar que existen iniciativas sostenibles para fabricar instrumentos de cuerdas, de vientos y de percusión. A continuación veremos algunas de ellas.
Residuos orgánicos para crear instrumentos
A veces se piensa que los residuos orgánicos son solamente basura inutilizable. Sin embargo, varios de estos residuos pueden servir para crear instrumentos musicales con sonidos prácticamente perfectos.
Uno de los ejemplos más destacables es el de la Orquesta de Instrumentos Reciclados de Cateura. Esta agrupación paraguaya nació en 2006 y está conformada por jóvenes y niños que viven en la comunidad instalada en el entorno del vertedero de Cateura, ubicado en la capital Asunción.
Su gran aporte a la música va de la mano con la luthería sostenible: los instrumentos se crean con piezas recicladas y desechos orgánicos. Así, los restos de latas, de botellas, de plásticos, etc., sirven para diseñar baterías acústicas y otros equipos de percusión. Asimismo, producen flautas con los residuos de tuberías, chapas, cucharas y objetos análogos. También han logrado hacer violonchelos con barriles de aceite y de pintura.
En los basurales se encuentra la materia prima de esta peculiar agrupación. Ellos no se avergüenzan de esta situación, por el contrario, se sienten orgullosos de poder contribuir al arte y al medio ambiente en un mismo proyecto. La Orquesta de Instrumentos Reciclados de Cateura no escatima en los géneros a interpretar: ejecutan composiciones de Beethoven, de The Beatles o de Metallica sin mayor complicación.
Favio Sánchez, profesor de música y director de orquesta, se siente muy contento por la evolución de este conjunto paraguayo. Él considera que “el mundo nos envía basura y nosotros le devolvemos música”.

Conoce todo sobre la creación de instrumentos clásicos
Pero no solo en Sudamérica se observa esta clase de iniciativas. La empresa norteamericana Blackbird Guitars, con sede en San Francisco, también sigue una línea similar. Esta firma se ha enfocado en la creación de ukeleles y guitarras acústicas con materiales compuestos, naturales y baratos. Las materias primas más utilizadas por la compañía son la fibra de carbono y las telas de refuerzo de lino. Esto es sorprendente, ya que, en principio, la fibra de carbono es propia de la industria automovilística, mientras que la semilla de lino es un herbáceo que se consume en aceites y en harinas.
Un caso similar se encuentra en Vermont, Estados Unidos, donde se halla la firma BugOutGuitars. Esta empresa se ha especializado en la creación de instrumentos siguiendo los criterios del ecologismo. Sus productos estandartes son las guitarras acústicas y los ukeleles de cáñamo.
La creación de instrumentos musicales basándose en el reciclaje es, definitivamente, un acto de conciencia social. En España, La Música del Reciclaje de Ecoembes viene comprometiéndose en este ámbito social y ecologista desde 2014.
Inspirándose en la Orquesta de Instrumentos Reciclados de Cateura, esta agrupación española también rebusca en la basura lo que se convertirá en sus materiales claves para fabricar instrumentos. En este sentido, los envases de vidrio y de plástico, las cajas de zapatos, las cajas de galletas, las latas, las cuerdas, los barriles y los elementos similares son transformados en guitarras, ukeleles, violines, violonchelos, equipos de percusión, etc.
Los portavoces de la agrupación subrayan que no solo se trata de reciclar y producir instrumentos, sino que estos deben sonar lo suficientemente bien para generar música. Señalan que siempre están buscando nuevas técnicas y mecanismos para aprovechar al máximo la basura y los residuos orgánicos.
De la mano con estas prácticas que aúnan la luthería y el reciclaje, La Música del Reciclaje de Ecoembes no descuida el aspecto humanista. En su página oficial se lee que este proyecto “tiene como objetivo ofrecer formación musical a menores en riesgo de exclusión social, educándoles en valores y favoreciendo su superación personal”. La instrucción que reciben los niños es completa y lleva a las disciplinas musicales hacia una ética de conciencia social y medioambiental.